¡Para esos días de calor! La mujer se pone de rodillas con el grifo de frente en una tina que ya está llena de agua caliente.
Ella se levanta hasta que su cuerpo quede cerca de la salida de agua, luego se inclina hacia adelante recargándose en la pared o en los lados de la bañera para mantener el equilibrio. El agua caliente relaja sus músculos y el roce del agua la hará descubrir una sensación que seguro querrá repetir. Si no tienen tina en casa, ir a un hotel será aún más excitante.