Ya lo dijo el escritor mexicano Octavio Paz, “en todo encuentro erótico hay un personaje invisible y siempre activo: la imaginación». Sin embargo, en ocasiones se nos agotan las ideas y nos preguntamos, ¿qué puedo hacer con mi pareja en la cama para salir de la rutina? La respuesta: Juegos sexuales.
¿Qué son los juegos sexuales?
Los juegos sexuales o también conocidos como juegos eróticos se pueden considerar como una herramienta más para lograr la pareja disfrute plenamente del sexo. Estos juegos permiten que tanto cuerpo como mente se enfoquen hacia el placer, haciéndolo más intenso, excitante y entretenido.
Es muy común que las parejas lleguen a un punto de estancamiento y de monotonía; las relaciones sexuales corren el peligro de volverse frías, distantes y rutinaria e incluso menos frecuentes. ¿Te suena familiar? Entonces continúa leyendo.
Beneficios de los juegos sexuales en pareja
Mediante la combinación de estímulos físicos y psíquicos, que se dan en los juegos sexuales, la mujer consigue que su vagina se dilate y, por tanto, que comience a lubricar. Además de que se trabaja el punto mental y el poder de los deseos más íntimos. Mientras que a los hombres, el estímulo de los juegos sexuales les permite una erección de calidad y gran satisfacción, debido a que en ellos es 90% mental.
En resumen, “los juegos sexuales son excelentes para refrescar nuestra vida sexual y convertir nuestra habitación o la casa entera en un salón de juegos”- sexóloga Alessandra Rampolla. ¿Estás listo para jugar?
Todo juego necesita un par de reglas
Antes de comenzar a jugar es importante definir las reglas, ya que todo juego sexual debe ser consentido por todos los participantes. En este caso, por ambos miembros de la pareja.
El respeto mutuo y hacia ti mismo es fundamental al momento de probar cosas nuevas en una relación. Es muy importante que sepas que los juegos sexuales saludables son los que ocurren con aprobación de quienes participan. Si tú piensas que no es lo tuyo, recuerda que siempre puedes decir NO.
Ideas para Juegos Sexuales
Si bien existen muchos juegos, pues la imaginación no tiene límites; a continuación, te dejamos cinco ideas de juegos sexuales más comunes para salir de la rutina.
*Tiempo estimado para el juego previo: mínimo 20 minutos.
1. JUGAR A NO VER
Venda los ojos a tu pareja y juega con su cuerpo. No hace falta que tengas ningún kit profesional para ello. Quítale la blusa o camisa y utilízala para taparle los ojos. Cuando tenemos un sentido inhabilitado, potenciamos el resto. Y si privamos la visión de nuestra pareja pueden pasar varias cosas: quien tiene los ojos vendados potenciará los otros sentidos, en especial el tacto, sentirá curiosidad y cierto misterio por no ver qué va a suceder, no tendrá que hacer nada, sólo disfrutar, debe tener confianza con la pareja para gozar del momento y no sufrir por lo que pueda suceder dentro de los parámetros de confianza y de consenso acordados con la pareja.
2. ATAR AL OTRO: El clásico juego sexual con corbatas
En esta ocasión, inmovilizamos a la pareja y quien es atado debe dejarse tocar y gozar y quien toca también es quien domina la situación. Es un juego para que uno se dedique completamente al otro. Sin que el otro pueda hacer nada.
3. ACEITE DE MASAJE
Solamente tocar el cuerpo, no vale hacer nada más. Por un día (o más) jueguen a tocarse, a acercarse a aquellas zonas erógenas que producen más placer pero no hagan nada más. Solamente tocar. Sin masturbación, sin sexo oral, sin penetración. Solamente tocar el uno al otro (por turnos) y con el aceite de masaje que facilite ese tacto. ¿No tienes en casa? Checa la opción placentera en nuestra TIENDA EN LINEA .
4. STRIP POKER
Si les gustan los juegos de cartas, ¡llévenlos a la cama! Un gran juego es convertir el póker tradicional en un strip poker sexy. Ambos comienzan a jugar vestidos con el mismo número de prendas y cada uno deberá quitarse una prenda cuando pierde una partida.
A medida que se vayan quedando sin ropa, cada vez que alguno pierda una partida debe cumplir con una actividad sexual.
5. USAR UN DISFRAZ PARA ADOPTAR UN ROL
No es imprescindible un disfraz entero; quizás puedes encontrar algo que te permita meterte en el rol de lo que desees y jugar como si no fueras tú. Te garantizamos que será divertido y excitante para tu pareja. ¡Ahora sí, a jugar!
¿Quieres más juegos? Chécate el video de la escritora Roser Amills donde nos explica algunos juegos sexuales para hacer que la vida sexual no sea aburrida. ¡Dale play!